El arte de la tapicería en cuero

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La tapicería en cuero es un proceso artesanal que crea, repara o renueva diferentes piezas de mobiliario, asientos, etc.

En nuestro taller nos encargamos de la reparación de sofás, sillas, butacas… Y en todos estos años de trayectoria hemos visto cómo puede llegar a cambiar el aspecto de un mueble simplemente al cambiar su tapicería.

 

Tapicería en cuero, un arte muy antiguo

Telas y pieles, colores, hilos, formas… Son muchísimos los aspectos con los que puedes jugar para crear o renovar un asiento.

El cuero es un material con mucha historia, tanto en el mundo como en sí mismo. En el cuero está escrita toda la vida del animal: zarzas, cornadas, parásitos…

Este material es uno de los favoritos en tapicería porque:

  • Es muy flexible
  • Es permeable y puede tratarse para conservarlo como el primer día

Por supuesto, también existen los materiales sintéticos que imitan, de manera muy aproximada, el cuero.

 

Proceso de tapizado en cuero

Como te contábamos en nuestro primer artículo, tapizar es un arte muy antiguo. El cuero fue el primer material que se utilizó y que ha mantenido su popularidad hasta nuestros días. En posteriores artículos te contaremos cuáles son los tipos más comunes, los muebles y superficies que pueden tapizarse con él, etc.

Volviendo al proceso en sí, las herramientas que se utilizan para tapizar son diversas. En este post nombramos las tres imprescindibles para todo tapicero, pero hay muchas más. Tecnología y tradición alcanzan el equilibrio perfecto en el arte de la tapicería, si bien es cierto que priman los procesos manuales.

Para trabajar con el cuero, aunque existan más elementos, estos son los principales:

  • Tela interna
  • Cuero
  • Destornillador
  • Alicates
  • Martillo
  • Máquina de coser
  • Grapadora

 

Fases del tapizado en cuero

Podemos decir que hay cuatro grandes fases dentro del proceso de tapicería en cuero. Dependiendo de la superficie o el objeto que estemos trabajando, del método del propio tapicero y lo que pueda surgir a lo largo del proceso, estas fases pueden variar.

  1. Estructura: en este paso se quitan las grapas y se retiran la tela o el cuero que queremos cambiar. Debemos tener cuidado con la estructura para no dañarla, ya que sobre ella montaremos la nueva piel. En este paso podemos incluir el trazado de la plantilla, el patrón que vamos a seguir. Habitualmente se usa la tela vieja para elaborar dicha plantilla y utilizarla como guía.
  2. Espumado: existen muchos tipos de espuma según el tipo de asiento que queremos conseguir (en artículos posteriores te hablaremos de ellos). Comenzamos ajustando el cuero en la parte posterior del asiento y grapando desde abajo. Debe permanecer tenso para que no queden arrugas ni exceso. Vamos rellenando con la espuma o ajustando el cuero a las planchas que hayamos colocado, y lo cerramos grapando.
  3. Corte: con el cuchillo de tapicería cortamos los bordes sobrantes.
  4. Costura: con un hilo resistente y elástico, que soporte la tensión propia del uso, vamos cosiendo las diferentes partes que forman el mueble.

 

¿Qué te ha parecido esta introducción a la tapicería en cuero? Permanece muy atento/a a este blog, pues poco a poco te iremos desvelando más curiosidades sobre este apasionante trabajo y los procesos en nuestro taller.

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